Tres días de hedonismo en Zagreb y sus alrededores

No tardará mucho en descubrir que los zagrebíes saben y les gusta detenerse y disfrutar de la vida y sus pequeñas alegrías, especialmente alrededor de la mesa. La cocina local es una tentadora combinación de diferentes influencias, los vinos croatas pueden figurar sin problema en la carta mundial de vinos, la escena gastronómica es dinámica y diversa, y la hospitalidad de Zagreb será la guinda del pastel de su experiencia. Si quiere conocer la ciudad no solo a través de sus calles, gente, atracciones y monumentos históricos, sino también a través de una saludable dosis de hedonismo, este itinerario se sirve para Usted.

Día 1

Mézclese entre la gente de Zagreb y tome un café en alguna terraza de la Ciudad Baja, observando la vida a su alrededor. Luego diríjase a Dolac, el mercado central de Zagreb, y disfrute de los colores y olores de las frutas y verduras de temporada, lácteos, carnes y productos de panadería caseros y otras delicias de toda Croacia. En la parte baja e interior del mercado, salude a las legendarias señoras que venden queso y nata, y también puede aventurarse a probar algo. Ahora que seguramente tiene mucha hambre y sed, busque un descanso cerca, con un gemišt y un gablec típico de Zagreb. Saciado y satisfecho, visite la colorida calle Tkalčićeva, suba a la Ciudad Alta y dé un paseo relajante por la parte más antigua y encantadora de Zagreb. De paso, visite el popular Museo de las Relaciones Rotas. Por la noche, disfrute de las creaciones culinarias de los chefs locales en alguno de los restaurantes de Zagreb recomendados por Michelin.

Día 2

Aproveche este día para explorar el potencial gustativo de Zagreb, pero, para variar, podría también arremangarse un poco y ponerse a trabajar. Inscríbase en un taller de cocina y aprenda a preparar unos štrukli irresistibles o vaya a buscar trufas en los bosques de Medvednica. Pase la tarde estudiando la escena de cerveza artesanal relativamente joven pero muy emocionante de Zagreb. Hay una cervecería artesanal en las afueras del oeste de la ciudad y otra en las del este, que estarán encantadas de recibirle para una degustación y después podrá relajarse con unos aperitivos en su sala de grifos. Y todavía está a tiempo de volver a la ciudad para probar la vida nocturna.

Día 3

Es hora de salir de la ciudad para adentrarse un poco en la naturaleza y ver en vivo de dónde proceden los mejores vinos espumosos croatas, así como los excelentes vinos tranquilos. Plešivica es una región vinícola de pequeña superficie, pero de grandes posibilidades, situada a media hora en coche de Zagreb, en las verdes colinas que rodean la ciudad pequeña de Jastrebarsko. También es un lugar donde se cruzan la ruta del vino y la ruta del queso. Apúntese a una cata en una de las bodegas boutique familiares y las horas con vinos superiores, embutidos caseros, paseo por el viñedo, recorrido por la bodega y una amena conversación con el vinicultor pasarán hasta demasiado rápido. No olvide reservar una deliciosa cena en uno de los restaurantes de Plešivica o Samobor que ofrecen comida tradicional local.